Hoy hablamos del clásico y atemporal collar de perlas. Sobra decir que hay pocas piezas en la joyería tan icónicas como este distintivo collar. ¡Su estilo es legendario!
Pero, si eres nueva en esto del mundo de las perlas, elegir entre las múltiples opciones disponibles puede ser un poco abrumador al principio. Por ello, danos cinco minutos de tu tiempo, ¡ y deja que arrojemos algo de luz!
Todo sobre el collar de perlas de mujer
Lo habrás visto en cientos de películas clásicas y, sin embargo, sigue estando tan de moda como el primer día. Esto tiene una explicación y es que, cuando algo funciona, ¿para qué cambiar?
Vamos a ver detalladamente los tipos de collares de perlas y algunas curiosidades. ¿Comenzamos?
¿Qué tipos de collares de perlas de mujer hay?
Con perlas naturales o cultivadas:
- Naturales: Se trata de perlas que se forman naturalmente dentro de las ostras u otros moluscos. Estos, al entrar en contacto con un agente irritante segregan nácar, que poco a poco se va acumulando hasta formar la perla. Estos collares son piezas únicas, altamente excepcionales y tienen un precio muy elevado.
- Cultivadas: Estas perlas también se forman dentro de los moluscos, pero con intervención del hombre, que los dispone en entornos similares a los naturales y les dosifica los irritantes para acelerar el proceso de producción de la perla. A efectos funcionales, estas perlas son idénticas a las anteriores, aunque se pierde el componente romántico de la pura naturalidad. Los collares con perlas cultivadas son piezas muy cotizadas, aunque su precio es inferior al de piedras naturales.
Con perlas de agua salada o dulce:
- Agua salada: Como se puede deducir de su nombre, estas perlas se forman en entornos acuáticos salados. Las perlas más representativas de esta sección son las Akoya, predominantemente japonesas.
- Agua dulce: Provienen de moluscos que viven en los lagos y en los ríos. No se consideran tan valiosas como las de agua salada, aunque tienen la ventaja de ofrecer al consumidor una amplia variedad de colores y formas.
- Con perlas artificiales: No son perlas, propiamente dichas, sino piezas que recrean su forma y color. Se fabrican a partir de vidrio, plástico y conchas de moluscos reales. Algunas están muy bien conseguidas y los collares resultantes son auténticas joyas.
Independientemente de esta clasificación, podemos encontrar los collares de perlas en un sinfín de diseños, ¡seguro que encuentras el que mejor se adapte a tu estilo personal!
¿En qué ocasiones podemos hacer gala del collar de perlas?
Históricamente hemos asociado el collar de perlas a posiciones de riqueza y situaciones formales, pero, por fortuna, hoy en día estos collares son más asequibles y, poco a poco, se están popularizando.
Mientras que antes se reservaba el collar de perlas para lucirlo en contadas ocasiones elegantes, actualmente es perfectamente normal recurrir a él para el día a día. Es verdad que resalta especialmente con looks sofisticados, pero no dejes de usarlo con vaqueros o looks más relajados si te apetece, ¡tendrás el toque preppy garantizado! Además, el brillo del nácar hará que tu piel parezca más luminosa.
Resumen
No sabemos qué tiene el collar de perlas que hace que la mujer que se lo pone se sienta con el ánimo más arriba en cuestión de segundos. ¿Será su energía? ¿Será su delicada naturaleza? Sea lo que sea, esta pieza bien vale un hueco en tu joyero. ¡Feliz compra!
(Fuente de la imagen destacada: Kayhan: 37894313/ 123rf.com)